Aunque ya hablamos AQUÍ de la tarjeta de memoria y su función en un móvil Android, debido a la importancia, incluyo en esta guía de iniciación otra vez este tema.
Así que, hablemos de la memoria, de la capacidad de almacenamiento de un móvil. En esa memoria un móvil guarda la información que necesita, tanto para su propio uso (el sistema operativo Android) como las aplicaciones y archivos que vamos guardando en él, sobre todo, fotos y vídeos.
La mayoría de móviles Android llevan una ranura para colocarles una tarjeta de memoria con la que ampliar la propia, pero con una salvedad.
Para entender mejor esa salvedad hagamos una comparación. Supongamos que tenemos una casa de 50 m2 y se nos queda pequeña. Podemos comprar un trastero de 500 m2 y guardar en él todo lo que en casa no nos quepa pero no podemos trasladar allí el baño, la cama del dormitorio o el televisor del comedor.
Sí podemos guardar en él ropa que no usemos, libros viejos o la bicicleta para así liberar algo de espacio en nuestra casa que, en cualquier caso, si es pequeña, seguirá siéndolo, pero algunas cosas no nos ocuparán sitio en ella.
En un móvil sucede lo mismo. El sistema operativo, las aplicaciones que instalamos o los vídeos y fotos que nos mandan por Whatsapp o Telegram o lo que descargamos de internet se guardan siempre en el propio móvil por lo que es conveniente que la memoria interna sea lo más grande posible. Sin embargo sí que podemos guardar en esa tarjeta de memoria las fotos y vídeos que hacemos con nuestra cámara cuando tocamos en su icono del menú, no cuando la usamos dentro de una aplicación.
Esto nos daría dos ventajas:
- La primera la que ya hemos dicho: las fotos y vídeos que hagamos no nos ocuparán espacio en el propio móvil.
- La segunda, en caso de que el móvil se estropee o se rompa, lo que enviamos y recibimos por Whatsapp se nos guarda en la copia de seguridad que ya vimos cómo hacer pero, si el móvil no enciende y no tenemos tarjeta de memoria, nuestras fotos y nuestros vídeos no se podrían recuperar a no ser que se reparara (si es posible que no siempre lo es). Si las guardamos en esa tarjeta, la sacaríamos y, en otro móvil o en un ordenador, las podríamos ver.
Pero para que esas fotos y vídeos que hacemos con la cámara se nos guarden en esa tarjeta no sirve sólo con ponerla al móvil, hay que decirle que lo haga, que los móviles son inteligentes… pero no demasiado. En unos abrimos la cámara, tocamos en Ajustes (tres líneas en unos, rueda en otros) y buscamos la opción de Guardar en tarjeta SD.
En otros móviles deberemos ir a Ajustes, buscar Almacenamiento y, dentro de este menú, cambiar para que se guarde en la tarjeta lo de la cámara. A veces la tarjeta aparece como Almacenamiento externo, lo que tiene lógica dado que no es la memoria interna del móvil.
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Esta entrada forma parte de un conjunto que pretende explicar el funcionamiento básico de un móvil Android, desde cero. Si quieres ver todos los apartados, te recomiendo que vayas a la página de presentación AQUÍ.
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