
Introducción
Hoy en día nuestros móviles son una extensión más de nosotros mismos: nos acompañan continuamente, incluso cuando estamos en casa, los dejamos siempre cerca, por si nos mandan un mensaje, poder contestar al momento. Es lo primero que miramos al despertarnos y lo último que comprobamos antes de dormirnos. Si en Solo en casa los padres no se hubieran dejado al niño sino al móvil, habrían vuelto a los dos minutos y no habría habido película.

Sin embargo, a pesar de ese uso constante, lo básico de su funcionamiento se escapa a muchos usuarios o, directamente, no lo conocen. Para remediarlo, crearé varias entradas hablando de Android, de lo más básico de su uso donde aprenderemos lo que es una cuenta de correo Gmail, para qué sirve, a instalar aplicaciones (apps para los modernos) y algunas cositas más. ¿Te parece muy básico? Tal vez lo sea, pero, aun así, atento a las entradas porque igual cuento algo que no conocías. ¿Empezamos?
¿Mi móvil es Android?
Lo primero que tenemos que averiguar es si el móvil que tenemos es Android o no. Para ello, miremos algunas pistas:
- El precio: Si nuevo te costó menos de 300 €, es Android.
- La marca: Si es un Samsung, Xiaomi, Alcatel, Oppo, Wiko… es Android
- La manzana: Si en la parte trasera de tu móvil no hay una manzana, es Android.
- La marca (2): Si no sabes qué tienes, es Android. El que tiene un iPhone (no Android) lo sabe, se enorgullece y no lo puede callar ni dejar de lucirlo.
- La marca (3): Si no es marca Apple (iPhone), es Android
El porcentaje de móviles Android en el mundo frente a otros sistemas operativos resulta ser de casi 9 de cada 10 * así que apostamos a caballo ganador y nos centramos en este sistema operativo.
Llevamos un ratito hablando de Android pero lo único que hemos dicho de él es que es un sistema operativo. Sin entrar en detalles, diremos que para que un dispositivo funcione necesita de una parte física (el hardware) que son componentes electrónicos y unos programas (el software) que hacen uso del hardware para que podamos interactuar con él. En cuanto al software hay básicamente dos tipos: el sistema operativo y las aplicaciones.
Si comparamos un móvil con una casa necesitamos tres elementos:
- El terreno sobre el que se construye. Eso sería el hardware.
- La estructura de la casa: paredes, techos, tuberías para el agua, cables para la luz, huecos para puertas y ventanas. Eso sería el sistema operativo.
- Los muebles, electrodomésticos, lámparas… Eso serían las aplicaciones
Pues Android es el nombre del sistema operativo que pertenece al gigante empresarial Google, empresa que nació como un buscador de información en internet y hoy en día es una de las mayores del mundo. Que Android pertenezca a Google es algo que condicionará (y facilitará) el uso de nuestro móvil.

Android es androide en inglés, y, según la Real Academia de la lengua, un androide es un robot con apariencia humana. Y tal y como podemos ver en la imagen, así es el logotipo de este sistema operativo.

Sobre el origen del nombre hay varias teorías: por el personaje de un videojuego que tiene una forma parecida, por una novela de ciencia ficción (¿Sueñan los androides con ovejas mecánicas? en la que se basó la película Blade Runner), porque el fundador de la empresa tenía ese mote, pero la verdad es que no se sabe a ciencia cierta. Aun así podemos decir que el nombre resulta muy adecuado porque los móviles nos han convertido en medio robots.

Por cierto, este sistema operativo se usa no sólo en móviles o tablets, sino también en muchos otros dispositivos, como relojes o pulseras inteligentes, coches, televisores, cámaras, consolas, mini PCs, neveras, hornos…

Y, para que puedas leer esta entrada donde quieras, aunque no tengas conexión a internet, te dejo el enlace para que la puedas descargar. Pincha sobre la imagen.
Esta entrada forma parte de un conjunto que pretende explicar el funcionamiento básico de un móvil Android, desde cero. Si quieres ver todos los apartados, te recomiendo que vayas a la página de presentación AQUÍ.
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Hasta la BITta.
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